Al “Chino” lo estrangularon, ataron a una piedra y botaron su cadáver en la ciénega de Progreso
PROGRESO, Yucatán, jueves 03/08/2023.- La investigación sobre la misteriosa muerte de Rodrigo G. (a) “El Chino ó el Brillo”, podría dar un enorme giro, debido a que la última vez que se le vio con vida es cuando lo levanto la policía municipal; “el cadáver tenía la misma ropa que el día de su detención”.
De manera extra oficial se informó que Rodrigo G. de 20 años de edad llevaba puesto una playera de color negro y un short verde la ultima vez que lo levanto una patrulla de la Dirección De Seguridad Del Puerto de Progreso, y días después lo hallaron muerto dentro de una zanja en la ciénega con una cuerda atada al cuello y una piedra amarrada a uno de sus brazos y llevaba puesto la misma ropa.
La necropsia que se le hizo al cadáver del Chino Rodrigo G. arrojó que su muerte se debió a una “Asfixia Mecánica Por Ahorcamiento” es decir lo mataron estrangulado, después le amarraron una piedra a su cuerpo y lo botaron dentro de una zanja en la ciénega a la altura de las calles 41 entre 96 y 98,
Ayer publicamos que en horas de la tarde se desplego tremendo operativo policiaco tras hallar el cadáver de un hombre que estaba atado de la garganta y tenían amarrado una piedra en uno brazo, el cual, en un principio estaba en calidad de desconocido, y horas más tarde se identificó como Rodrigo G. (a) “El Chino ó el Brillo” de 20 años de edad.
Agentes de la Secretaría Seguridad Pública (SSP) acordonaron el área de ciénega donde estaba el cadáver, mientras agentes de la Fiscalía General Del Estado (FGE) y a la Policía Estatal De Investigación (PEI) realizaron las primeras indagatorias y abrieron una carpeta de investigación por homicidio.
Rodrigo G. vivía en una casa de la calle 94 entre 39 y 41 del puerto de Progreso, cuando hallaron su cadáver dentro de la zanja que se construyó en tiempos del gobernador Víctor Cervera Pacheco ya estaba comenzando a descomponerse, al parecer después de asesinarlo lo botaron a la ciénega para que se hundiera y se lo devorara algún lagarto, pero el cadáver abofado y salió a flote.
Hasta el momento el caso se sigue con total hermetismo ya que no es la primera vez que asoman cadáveres tirados en la ciénega o en la zona de playa, pero hasta el memento esos misteriosos casos se les ha dado el famoso carpetazo por las autoridades, de modo que no hay detenidos, ni sospechosos por mantener la imagen del Yucatán seguro.