Joven madre de familia murió de manera misteriosa, su esposo asegura la envenenaron
TUCUL, Yucatán, lunes 09/05/22.- A más de un mes y medio que su esposa murió de manera misteriosa la Fiscalía General Del Estado (FGE) se sigue negando a realizar las investigaciones ya que Carlos Cardeña Uc sospecha que su esposa murió envenenada.
Carlos Cardeña sospecha que a su mujer la envenenaron en la casa hogar de ancianos de Ticul mientras trabajaba cuidando a adultos mayores a través del programa federal “Jóvenes Construyendo El Futuro” porque sabía muchas cosas que hacen unas presuntas monjas “muy malas” con los viejitos.
Estas monjas presuntamente maltratan a los viejitos, les quitan sus pensiones de las becas federales, no les dan de comer e incluso los dejan morir enfermos para luego quitarles su dinero, aseguro en vida la esposa de Carlos Cardeña a sus familiares quienes le pidieron que se quitara de ese trabajo antes que le hicieran algo.
El pasado 20 marzo de 2022, minutos antes de las 2:30 de la tarde Melisa Guadalupe Salazar Pech de 23 años de edad se desvaneció en su trabajo, la llevaron al centro de salud donde el doctor en turno certifico que la joven estaba bien de salud, pero que se la lleve a su casa porque estaba bien drogada y ebria.
El médico le dijo a Carlos Cardeña que su mujer estaba dormida y que la lleve a su casa, pero en realidad su esposa estaba muerta, el ahora viudo aseguro que es una mentira que su mujer estaba ebria y drogada, porque estaba en su trabajo cuidando viejitos cuando se desvaneció.
El director del centro de salud de Ticul Dr.Luis Alfredo Manzanero T. en el acta de defunción con folio numero 212775589 certificó que Melisa Guadalupe Salazar Pech de 23 años de edad murió en su casa de un Infarto al Miocardio, e Hipertensión Arterial, cosa que es mentira por que murió en la clínica, indico Carlos Cardeña.
El cadáver al realizarle la autopsia arrojo que la joven Melisa Guadalupe falleció de muerte cerebral, nunca menciono que la señora estaba drogada y tomada, por lo que el viudo solicito una prueba de sangre en su momento ya que sospechaba que a su mujer la envenenaron.
Se le sacó la sangre a la difunta, pero la fiscalía no hizo la prueba para descartar el presunto enseñamiento bajo la excusa que no tenía el reactivo para dicha prueba, después dijo que la sangre se echo a perder por lo que era imposible realizara dicha prueba.
Carlos Cardeña solo pide justicia y se investigue la muerte de su esposa por envenenamiento ya que aseguro que el Centro de Salud de Ticul en más de dos ocasiones han falsificado y manipulado el acta de defunción de su difunta pareja, ya solicité apoyo de la Comisión de Derechos Humanos de Yucatán CODHEY pero tampoco nos ha ayudado indico el deudo.
Mi esposa un día antes de morir dijo que dentro de esa casa hogar de ancianos en Ticul pasan muchas anomalías, las monjas agreden y maltratan a los abuelitos que tienen en custodia, finalizo Carlos Cardeña.